miércoles, 18 de febrero de 2009

Para empezar

Como me gusta mucho la poesia e intento tramitir ese cariño a mis alumnos, voy a empezar regalándoos este poema de Celaya que siempre me ha emocionado por la verdad que encierra.


Educar es lo mismo

que ponerle motor a una barca.

Hay que medir, pesar, equilibrar...

y poner todo en marcha.

Pero para eso

uno tiene que llevar en el alma

un poco de marino, un poco de pirata,

un poco de poeta y un kilo y medio

de paciencia concentrada.

Pero es consolador soñar

mientras una trabaja,

que ese barco , ese niño

irá muy lejos por el agua.

Soñar que ese navío

llevará nuestra carga de palabras

hacia puertos distantes,

hasta islas lejanas...

Gabriel Celaya


2 comentarios:

  1. Hola Pilar:
    ¡Qué buen comienzo! y que alegría poder compartir este viaje.
    Al leer tu poema me ha venido a la mente este otro:
    "Si quieres construir un barco, no empieces por buscar madera, cortar tablas o distribuir el trabajo, sino que primero has de evocar en los hombres el anhelo de mar libre y ancho".
    Antoine De Saint Exupery
    ¡Feliz travesía!
    Un abrazo

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  2. Me ha encantado leer este poema de Celaya, que no conocía y que nos da tantos ánimos.

    José Mari.

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